Su verdaero nombre fue David Robert Jones; nacido en Londres, el 8 de enero de 1947 y fallecido con 69 años recién cumplidos el pasado 10 de enero.
Artista
camaleónico, cambió varias veces de estilo y recogió múltiples
influencias, sobre todo de la psicodelia y el punk, que le hicieron
adoptar en los años setenta un provocativo aspecto andrógino,
anticipándose a personajes como Boy George. Trabajó junto a
artistas de la talla de Mick Jagger, Iggy Pop, John Lennon o Brian
Eno, y colaboró con jóvenes artistas, a cuya fama contribuiría
notablemente, como es el caso de Lenny Krawitz.
Ziggy Stardust(1972) o Let’s dance
(1983) son algunos de los discos míticos de su carrera, jalonada
siempre por el éxito y la polémica. También fueron frecuentes las
incursiones de Bowie en el mundo cinematográfico; su película más
celebrada es Feliz Navidad, Mr. Lawrence (1983), de Naghisa Oshima.
David Bowie comenzó su carrera
cantando y tocando el saxofón en pequeños locales y también en
institutos, con músicos aficionados como The Manish Boys, David
Jones & The King Bees o Lower Third. A finales de la década de
1960 comenzó a grabar sus primeros sencillos, que luego se
integrarían en su primer álbum, David Bowie (1967). Se interesó
además por el teatro, llegando a formarse como mimo y actor con
Lindsay Kemp, una influencia que se dejaría notar más tarde en sus
actuaciones.
En 1969 grabó el álbum Man of
Words/Man of Music, en el cual se incluía el single “Space
Oddity”, que llegaría al puesto cinco de las listas en el Reino
Unido. Después de realizar actuaciones en diversos países, entabló
amistad con el que se convertiría en su nuevo mánager, Toni De
Fries. En 1970 y 1971 publicó los álbumes The Man Who Sold The
World y Hunky Dory, en los que ofreció una provocativa imagen
andrógina, en consonancia con el glam, la tendencia que dominaba en
aquel momento el rock británico.
A partir de 1972 empezó el gran ciclo
de transformaciones que caracteriza su personalidad camaleónica: en
The Rise and Fall of Ziggy Stardust and the Spiders from Mars encarna
a una estrella bisexual del rock procedente de otro planeta. Esta
tendencia a la ambigüedad continuaría en Aladdin Sane (1973), su
siguiente trabajo. Ese mismo año Bowie posó junto a la modelo
Twiggy en la portada de Pinups, una compilatorio de algunas de
las mejores canciones del rock de los 60, y apareció desnudo en la
carpeta de su álbum Diamond Dogs (1974).
Las canciones de Bowie generaban una
atmósfera futurista, obsesiva, donde daba cabida a breves guiños
dirigidos al rock estadounidense y desarrollaba profundas y densas
secuencias por las que desfilaban personajes orwellianos (el Gran
Hermano de la novela 1984, de George Orwell), arquetipos de una
modernidad decadente o personajes que parecen surgidos del género
gótico. En Gran Bretaña las críticas a este último álbum fueron
duras, y Bowie decidió dar un giro a su carrera, adoptando una
imagen personal más sobria e introduciendo la música disco y el
soul como influencias estilísticas en sus composiciones. Se lanzó a
la conquista del mercado estadounidense con el álbum Young
Americans (1975), que ascendió al primer puesto de las listas de
ventas. Con el respaldo de Andy Warhol, con el que trabó gran
amistad, su popularidad creció rápidamente.
En esta segunda mitad de la década de
1970 Bowie continuó experimentando con nuevos sonidos. El elemento
electrónico estaba cada vez más presente en su música, a través
del uso recurrente de sintetizadores y de la manipulación de su voz
en los temas. Esto queda patente en álbumes como Station to
Station (1976) y Low(1977), en el que inició su asociación con el
músico y productor Brian Eno. Bowie evolucionaba hacia un personaje
de aspecto frío y distante, envuelto en largos abrigos de cuero, lo
que le valdría el sobrenombre de El Duque Blanco.
Heroes (1977) ofrecería estructuras y
sonidos aun más densos y complejos. En los años siguientes, y
todavía con Eno, Bowie grabó Stage (1978), álbum en vivo resultado
de su gira de aquel año, y Lodger (1979), que señalan su vuelta
hacia un rock fresco, original y de sencilla comercialización,
aunque enriquecido por todas las innovaciones de la etapa anterior.
Con Scary Monsters (1980), que seguía esta misma tendencia, terminó
otra etapa de su carrera.
Bowie emprendió en ese momento su
periodo de mayor éxito comercial, pero también el de más críticas
adversas por parte de los especialistas, que le achacaban un
empobrecimiento musical. En Let's Dance (1983) y Tonight (1984)
compaginó temas herméticos con baladas que le facilitarían la
colaboración con otros artistas, como Iggy Pop, Queen, Tina Turner y
Mick Jagger.
Su enorme éxito se vio favorecido por
sus trabajos para el cine. En 1986 compuso la banda sonora de Dentro
del Laberinto, filme dirigido por Jim Henson y producido por George
Lucas, donde además interpretaba uno de los papeles protagonistas.
Ya atesoraba una extensa trayectoria como actor en otros filmes
anteriores, como The Man Who Fell To Earth (1976) de Nicolas Roeg, Gigoló (1979) de David Hemmings, El ansia (1983), de Tony Scott,
Feliz Navidad, Mr. Lawrence (1983), de Nagisa Oshima o Cuando llega
la noche (1985), de John Landis.
Su siguiente trabajo fue Never Let Me
Down (1987). Tras un periodo (1989-91) en el que trabajó con la
banda Tin Machine, Bowie retomó su carrera en solitario con Black Tie
White Nose (1993). Casado con la modelo Iman, comenzaba una nueva y
fructífera etapa musical. Con Outline (1995), Bowie volvió a
transformarse (esta vez adoptaría la identidad de un detective en
una urbe futurista) y recobró, con sonoridades de su época con Eno,
su preeminencia en la vanguardia del rock. Earthling (1997), Hours
(1999), Heathen (2002), Reality y Club Bowie (2003) son algunos de
sus trabajos posteriores. Una grave operación de corazón le obligó
a cancelar su gira europea de 2004, y aunque consiguió recuperarse
de la misma, no volvió a actuar en directo. Prosiguió sin embargo
su labor musical en los estudios, editando nuevos discos como The
Next Day (2013) y Black Star (2016), cuyo lanzamiento precedió en
dos días a su muerte.
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